Esta es una mirror de la entrada de 26 de abril en mi Facebook
La Organización mundial de la Salud recomienda el uso de mascarillas para personal sanitario y personas que están al cuidado de enfermos, especialmente para prevenir el contagio del que la porta, así como de enfermos o personas que creen que pueden ser portadores asintomáticos, capaces por tanto de transmitir la enfermedad, a fin de evitar el contagio de quienes les rodean. En otros casos, para evitar el contagio suele ser más conveniente mantener la distancia de seguridad recomendada, que la OMS ha determinado en 1 m (el ECDC recomienda 1,5 m y el CDC 2 m)

Es cierto que en determinadas condiciones resulta difícil o incluso imposible mantener esta distancia de seguridad, tal como ocurre en el transporte público o en determinados puestos de trabajo. Por este motivo el ECDC recomendó también el uso de mascarillas de tipo quirúrgico o higiénico, con el fin de evitar el contagio de otros en las situaciones antes indicadas, cosa que también ha reconocido la propia OMS y ha recomendado, a su vez, nuestro gobierno.

Sin embargo es fundamental recordar que las mascarillas dotadas de válvula de exhalación, que son algunas de las FFP2 y todas las FFP3 y N95, no son adecuadas para su uso por el público en general, pues por dicha válvula pueden salir las gotículas (flügge) al toser o estornudar e incluso al hablar, impidiendo la función que se pretende, de no infectar a aquellos que se hallen a nuestro alrededor. Este tipo de mascarillas en la situación en que vivimos solo son válidas en el ámbito sanitario.


Esto mismo debería ser aclarado por nuestras autoridades, pues es de importancia capital. Bien al contrario, en un programa de preguntas y respuestas emitido por TV1 el sábado de la semana pasada por la mañana, el propio Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de alertas y emergencias del Ministerio de Sanidad, en presencia del ministro Pedro Duque, pretendió explicar el uso de las distintas mascarillas, refiriéndose a dicho dispositivo en una mascarilla que mostró como una válvula o filtro, demostrando que claramente no sabía de lo que estaba hablando. Adicionalmente, y a tenor de sus explicaciones inmediatas, la consideró como una mascarilla adecuada para todo tipo de personas.

Frente a esta circunstancia y dada la importancia del asunto, le remití de inmediato un correo electrónico con todas las explicaciones de tipo legal y las referencias tanto normativas como de documentos técnicos al respecto del propio Centro Europeo de Control de Enfermedades de la UE e incluso las características y especificaciones técnicas descritas por uno de los fabricantes de mayor renombre. He esperado pacientemente durante una semana, pero en ausencia de respuesta, que para mí demuestra su desinterés por el tema y cierta arrogancia, procedo a hacer público el contenido del correo electrónico que le remití, con todas las explicaciones al respecto, que considero de gran interés para cualquiera que pretenda la protección de la salud pública.

Ciertamente, no pongo en duda el buen currículum de este señor, a la cabeza del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias del Ministerio de Sanidad, pero obviamente sobre el uso que debe hacerse de las mascarillas para la prevención de la transmisión de enfermedades parece ser que necesita un repaso.

Os adjunto el contenido del correo electrónico así como algunas imágenes y un póster del ECDC (el de color verde, del cual os adjunto una captura de la zona donde aparece la referencia a la válvula de exhalación)


Sr. Simón:

He visto hoy el programa de la Infancia pregunta, en el que aparecía vd junto al ministro Pedro Duque y en el que se ha referido a la mascarilla quirúrgica y a otra que a simple vista parecía una mascarilla FFP2, o pieza facial de protección respiratoria, usando la terminología anglosajona, dotada de válvula de exhalación.

Se ha referido usted a la válvula diciendo que se trataba de una válvula o filtro. Debemos ser rigurosos y se trata exclusivamente de una válvula, ya que el material filtrante es el textil de la propia pieza facial circundante.

La válvula, como su propio nombre indica, es meramente un dispositivo que facilita la exhalación, pues en las mascarillas o EPI de protección respiratoria de mayor capacidad filtrante el aire tiende a retenerse al espirar, por lo que la apertura de la válvula mejora el confort del usuario.

Sin embargo esta misma apertura al espirar permite la salida de las goticulas respiratorias exhaladas, especialmente tras una tos o estornudo. Por este motivo este tipo de EPI de protección respiratoria dotado de válvula de exhalación, cómo ocurre con muchas FFP2 y todas las FFP3 no son en absoluto adecuadas para la protección de la población en general en los términos que se ha planteado, es decir, no para proteger al propio usuario de la pieza facial de protección filtrante o mascarilla sino con la finalidad de proteger a otras personas de las gotículas respiratorias emitidas por una persona sintomática o pre-sintomática.

Esto no se trata solo de mi opinión, sino que se deriva del propio Reglamento UE 2016/425 en https://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/TXT/HTML/?uri=CELEX:32016R0425&qid=1587199561789&from=ES#d1e2042-51-1 que regula los EPI, la norma EN 149:2001+A1:2010 que determina las características de estos dispositivos respiratorios filtrantes
https://www.une.org/encuentra-tu-norma/busca-tu-norma/norma%3Fc%3DN0044643&ved=2ahUKEwiYjPbz1fHoAhWNDxQKHdgkBNkQFjAAegQIARAB&usg=AOvVaw3goYkl9EU5c5WyV1DR29D9 y de las especificaciones del fabricante, como las que adjunto de uno de los fabricantes más bien valorados


En todo caso, el propio Centro Europeo de Control de Enfermedades indica que solo son adecuados para la protección del propio usuario y no para la protección de otros cuando estos dispositivos están dotados de válvula de exhalación. No son por tanto adecuados para controlar la fuente de infección.


Creo que esto sería muy importante aclararlo a la población, pues todos vemos cada día en la calle, empresas y medios de comunicación a una gran cantidad de personas llevando mascarillas o EPIs del tipo FFP2 y FFP3 con válvula de exhalación, pensando que son más efectivas que las tipo quirúrgico, cuándo es justo al contrario para la finalidad con la que se ha planteado.

Por cierto, a ver si incluyen ustedes a algún veterinario experto en salud pública en el equipo de gestión de esta crisis. Les recuerdo que en su origen se trato de una zoonosis, cómo prácticamente todas las epidemias que nos han asolado en diferentes épocas, y que los veterinarios, junto a médicos, farmacéuticos, dentistas y especialistas en ciencias de la salud, somos también profesionales sanitarios.

Cordialmente,

Un cordial saludo.

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